14 de julio de 2009

Los caminos de la vida...

Este es un gran vallenato, una gran canción de los diablitos. Acabo de cumplir 39 primaveras, he vivido en 3 continentes, he trabajado en sitios que no me imaginaba que existirían, y he tenido la fortuna de conseguirme gente en esos caminos de la vida que se pueden considerar como de otro planeta.

Así, que después de prácticamente 3 años en este Sudeste Asiático he llegado el momento de regresar al sitio donde comencé a caminar en la vida, el sitio de donde vengo, al que pertenezco por corazón y espíritu. Es buen momento para ver el capítulo asiático, "discernir" sobre esos caminos de la vida que he ido tomando. Momento de acariciar mi corazón como no ha sido acariciado en Asia, momento de sentir y vivir con gente amada, querida, añorada. Momento de verse y decidir para dónde agarrar en el futuro. Dada la opción de vida elegida, tengo todo un planeta, 5 o 6 continentes, y muchas opciones, gracias a Dios. Estaré en Vietnam, España, Cambodia, América o África, pero lo que no dejaré de ser nunca es Catuchero. Prometido.

16 de mayo de 2009

Sección "estampas fotográficas del verdadero Vietnam": Cascos

Abro la enésima sección del blog: "estampas fotográficas del verdadero Vietnam".
Todo el mundo que busca alguna imágen de Vietnam encuentra los arrozales con la gente trabajando en ellos o la bahía de Halong con las enormes paredes calcáreas emergiendo del mar del sur de China.
Sin embargo el verdadero y cotidiano Vietnam es diferente, muuuuuuuuyyyyy diferente.
Después de más de dos años viviendo en Vietnam he visto de todo, he podido quedarme perplejo con estampas en donde mi cerebro no daba crédito a lo que veían mis ojos. Pocas veces he tenido tiempo de reacción en la perplejidad para que quedara inmortalizado en una foto, pero algunas hay. Empezaré a colgar algunas muestras.

"Un día cualquiera conduciendo el coche del proyecto desde Hoa Binh a la Reserva Natural con mi compañero Thien. De repente veo que el motorista delante del coche, empleado de la compañía nacional de electricidad (facilmente distinguible con el uniforme estilo "Guantánamo") lleva algo que sobresale de su casco. No llegamos a distinguir que coño es y nos intentamos poner cerca de él...... no damos crédito a lo que vemos. El tío se había hecho un apaño con una percha para que hiciera de bisagra para mantener la visera frontal del casco". Gracias a mi compañero Thien, pudimos dejar constancia del "apaño" del colega. Vivir para ver"


"Un día cualquiera en el aeropuerto de Ho Chi Minh (vamos, el Saigón de toda la vida). Hemos facturado, y pasado ya el primer control del detector de metales. Estamos en la cola para pasar el último antes de embarcar. De repente me fijo en la cola de al lado, y joder, no me lo puedo creer, UNA SEÑORA CON EL CASCO PUESTO..... a lo mejor se cree que si lo lleva en el avión y se la pega no le va a pasar nada. Lo mejor es que una gran parte de los vietnamitas no usan el casco todavía, pero es la primera vez que veo en toda mi vida a alguien con el casco puesto para subir al avión".

7 de mayo de 2009

... pero tengo a Canela

En la anterior entrada os contaba que todavía no comía perro...... pero ¿cómo voy a comerlo si tengo a Canela?.
Nunca he tenido perro, hasta que han llevado uno al Departamento de Protección Forestal de Hoa Binh, donde tengo la oficina en Vietnam. Tengo que decir que fue un amor a primera vista. Es un cachorro de lo más juguetón, y enseguida le puse canela. Canela ya no responde a su nombre vietnamita "Le", solo responde por Canela, y es un problema para su dueño (el guarda del departamento, qe vive ahí mismo), porque es un nombre demasiado largo para los vietnamitas. Eso es lo que tiene un idioma casi monosílabo que depende tanto de la entonación; se les atragantan las palabras largas como a mi los tonos.
El caso es que Canela y yo nos hemos hechos cantidad de amigos a base de llevarle los restos de comida que voy apañando por ahí.... y sabeis en qué pienso cada vez que me despido de ella.... ¿Te comerán esta noche?.

18 de marzo de 2009

Tranquilos, todavía no como perro

Desde el inicio de este blog, mi amigo "Comandante" está esperando que haga caso a su petición de abrir una sección culinaria vietnamita, y poder explicar las excelencias de lo que se puede comer acá. Está próximo el día que inicie esta sección. Tengo que decir que la cocina vietnamita es divina, soy un auténtico admirador y degustador de esta gastronomía, con verdaderas recetas maestras de comida que nosotros también cocinamos (mariscos, carnes, verduras, pescados, arroces...), pero también de otros productos elaborados que no son muy comunes entre nosotros (decenas de variedades de nem -rollitos muchísimo más deliciosos que los chinos-, tofú, caracoles, hierbas, pho, my, mien, bún...).

Y por supuesto, está esa parte medio macabra, medio exótica, de otras "comidas" como pueden ser perros, gatos, serpientes con el corazón todavía latiendo, ratas, grillos, saltamontes...., de las que solo declaro cierto "aprecio" por éstos últimos, a los que les encuentro un cierto sabor a "quisquillas.

En estos días parece que la cosa de comer perros o gatos está jodida; no os preocupeis porque todavía no me he pasado de lo exótico invertebrado a lo vertebrado.Carne de perro lista para consumir en un mercado de Hanoi. (Foto: Heiman Wertheim). Tomada de El Mundo.es

Ya os mandaré una selecta colección de imágenes del mercado al lado de mi casa en Hoa Binh.



22 de febrero de 2009

Sección mi vida en Hoa Binh (5): Mi peluquería

En Hoa Binh me he convertido en todo un señorito que tiene peluquero y todo. Y es que no hay nada peor que venirse a un país de éstos para convertirse en un burgués, y disfrutar de la opulencia, en mi caso el tener un peluquero propio al que visito en cuanto siento que un pelo me crece más que los demás.
Sin entrar en detalles de la calidad de mi peluquero, lo mejor es ir a mi peluquería, sin ningún tipo de duda. Un sitio con vistas, pero a cubierto.
Siempre, siempre, siempre que voy a la peluquería me acuerdo además de Paco, todo un padre para mi, además del rey entre los "manitas". Estoy seguro que Paco le costar'ia superar al manitas del peluquero, "Mr. Huong".


Mi peluquería dispone de todos los servicios que cualquier cliente refinado puede desear. Dispone de hilo musical (foto abajo derecha), aunque el altavoz hace mucho que dejó de fabricarse para lor ordenadores. El sillón es totalmente regulable para todos los tamaños, razón de esa tabla que cuelga del árbol, ya que se atraviesa entre los barrotes del reposamanos del sillón, y los niños alcanzan una altura óptima para cortarles el pelo. Ni que decir tiene que el reposapies, en forma de gigante cascote de obra es de lo más cómodo.


Si te detienes en la foto de la izquierda, podrás comprobar algunos de los detalles más importantes en cualquier peluquería. Un buen cepillo en forma de "taco de goma espuma" para quitarte los pelos, aunque te dejen pelos de otros clientes (parte superior de la foto). Agua caliente para poder hacer los servicios más delicados, aunque a veces el termo tiene fugas y no mantiene el agua caliente. Y como el sitio es de nivel en Hoa Binh, tiene su propio "bidón de la basura" para arrojar las cuchillas desechables y los papeles (como dice mi amigo y compañero Thien, el que me enseñó esta maravilla de peluquería "el sitio es tan limpio, que usa una cuchilla para cada cliente").




El servicio "extra" de esta peluquería no queda en todo lo mostrado hasta ahora. Tiene agua "corriente" por si necesitas lavarte, por lo que te ofrece generosamente agua de este bidón que cuelga de una tablillla atravesada del porta de la bici (deteneros y deleitaros en el "grifo" del bidón).

Pero ahí no queda todo lo que te ofrece esta peluquería, porque funciona hasta bien entrada la noche para servir a los clientes con jornada intensiva, para ello dispone de una necesaria instalación lumínica, imposible de describir por su impensable sistema.

Y lo mejor de todo es que todo es replegable. Toda la peluquería cabe y se desinstala en una bicicleta. Ya sé lo que todos os estais preguntando, no creais que os dejo con la duda. Precio del corte de pelo: 0,55 cts. de euro.

15 de febrero de 2009

Las vueltas que da la vida

Que "los caminos del Señor son inescrutables" y "las vueltas que da la vida" son dos frases que se oyen mucho es verdad, pero no creo que se le preste demasiada atención hasta que nos pasa en "carne viva".

Desde que he venido a Asia, y ya va para más de dos años y medio, todavía muchas veces cuando logro situarme en una dimensión de observador externo a la realidad que me rodea, me sigue asaltando esa frase tan repetida en mi mente durante los primeros meses "[....] -omito taco porque hay niños que visitan el blog- quién me iba a decir que iba a venir a Asia, que iba a trabajar acá, qué estaría más tiempo en Vietnam que lo que he estado en Venezuela".

Quizás el salto de La Adrada a Ha Noi primero, y después a Hoa Binh ha sido demasiado brusco para un auténtico paisanín del valle del Tiétar como soy yo, pero desde luego que lo di, y llevo dos años y medio. En menos de tres semanas me convertiré en el representante más antiguo de cualquier ONG española en Vietnam.

Y el salto lo di porque me surgió la posibilidad de realizar un trabajo precioso con todo el apoyo y confianza institucional que uno pueda aspirar, pero sobre todo porque aprendí hace bastante tiempo que hacer la vida tan amplia como es nuestro planeta, siempre es un enriquecimiento personal y un aprendizaje impresionante. Solo hace falta superar el vértigo que supone cerrar la puerta de casa e irte solo con tu maleta, y con el acantilado de la incertidumbre en el estómago.

Dos años y medio después de venir, puedo decir que fue todo un acierto este salto, y que aunque sé que el valle del Tiétar me está llamando con fuerza, cada vez más, voy a seguir dejando que la "vida me siga dando vueltas, y que el Señor me siga mostrando esos caminos".

16 de enero de 2009

Para mi hermanín

Escribir estas palabras en tu blog sabes muy bien que no va a ser nada fácil para mi hoy, hermanín. Pero es lo que me sale porque tu has sido la razón de ser de este blog casi desde que nació.

Y lo va a seguir siendo así. Tendré que acostumbrarme a no recibir tu fiel e infalible comentario a cada entrada, pero nada más. En este blog quedan un montón de comentarios, muchos de ellos encriptados en nuestra complicidad, por lo que no me importará escribirte más si cabe, aunque no reciba ninguno nuevo más por este medio. Todo tu amor fraterno, todo tu ejemplo de cómo tiene que ser un gladiador en esta vida, de cómo practicar en la práctica la máxima catuchera "pa'lante es pa'llá".... seguirán en este blog y en mi vida hasta que nos volvamos a ver de nuevo, hermanín. Solo me ha quedado por decirte una cosa: eres un auténtico catuchero, de los de verdad, de los que habeis nacido tocados por un "don" especial para dar ejemplo de amor por la vida, de fraternidad, de esperanza, de lucha, todo aquello que representa Catuche.

Por eso quiero hacer hoy tu máxima de "pa'lante es pa'llá", y escribirte que aunque me dejes un poco huérfano, solo es un poco. Sabes que te quiero que jode, y que tu has estado, estás y estarás SIEMPRE conmigo. Hoy estoy triste, pero a la vez enormemente orgulloso de ser tu hermanín, de haber sido tocado por la gracia de tu amistad y tu amor.

Y como el aliento casi no me da para más hoy, solo quiero decirte que has sido tan artista, que has conseguido sin venir a Vietnam la más especial de las imágenes de este blog. Juntar en una misma foto lo mejorcito que tengo en Vietnam, con lo que tengo en España. Estoy seguro que te estás partiendo de todos, porque al final conseguiste conocer una gran parte de mi pedacito de mi vida en Vietnam sin agarrar un solo avión; Chi Hang. Manda huevos que al final consiguieras lo que querías en plan Mahoma, llevando a la propia montaña vietnamita a ti.

Solo me queda decirte hermanín,

Chuc suc khoe tot lanh. Hen gap lai em Chema.

Anh Santi yeu em Chema rat nhieu!!!!!!!!