15 de octubre de 2007

España con ñ, "semos" diferentes....

Este fin de semana pasado volví a la isla de Cat Bá, ya os he hablado de esta isla vietnamita en este blog, merecedora de un capítulo en mi sección del chimboviajero. Bueno, paseando por esta Reserva de la Biosfera, concretamente por el camino que va por el acantilado de la playa nº 1 a la playa nº 2, donde uno va disfrutando de los islotes que emergen en el mar del sur de China, me tope con una "ñ", signo identificativo de "lo español".

Fijaos en esa cosilla blanca en el suelo junto a la escalera.

Es posible que la "ñ" fuera "depositada" por algún vietnamita que fue a España a por pañuelos de papel, o algún "hermano hispanohablante" que pasaba por ahí, pero enseguida pensé que algún cerdo/a ibérico le pesaba demasiado el envoltorio de los pañuelos de plástico. Mucha gente critica a los vietnamitas por su poca educación cívica por tiras cosas al suelo, pero algunosque no son vietnamitas son iguales o peores, porque seguro que han tenido muchas más oportunidades de concienciarse sobre este tipo de temas.

9 de octubre de 2007

Chuc suc khoe: el lado más técnico, complicado y oscuro de mi trabajo

¿Qué es lo más importante de mi trabajo?, ¿mis más de 10 años de experiencia en Cooperación?, ¿mis limitados estudios?, ¿mi presunto don natural para hacer la pelota según algunos?, ¿mi capacidad de adaptación?, ¿mis enchufes?..... No señores y señoras, la piedra angular de mi trabajo en la zona de Vietnam donde trabajo es poder compartir, bromear, disfrutar y ser "uno más" en la costumbre ancestral, especialmente arraigada en el norte de Vietnam (incluidas las minorías étnicas), de beber "ruou" (vino de arroz). Hay muchos foráneos y extranjeros que han rechazado o no han entendido adaptarse a esta clave de la cultura del norte de Vietnam, y sus trabajos han sido estériles o no lo suficientemente exitoso al no entender la cultura social de un lugar y lo que es el trabajo con las comunidades.

Sin embargo yo, paladín del trabajo comunitario allá donde vaya, en un magnífico y sufrido trabajo de adaptación, en un arrebato de generosidad sin precedentes con la gente local con la que tengo que trabajar, me he sacrificado lo indecible para ser el rey del "ruou" (vino de arroz) en Hoa Binh. Así, que sin prestar mucha atención a mi hígado, llevo desde hace un año un severo, estricto y duro entrenamiento en el noble ejercicio de beber chupitos de vino de arroz hasta el infinito con todo tipo de personas, cargos del Partido, personas de peso en las comunidades..., pero especialmente jovencitas solteras y casadas de buen ver, que hacen cola por brindar conmigo con los brazos entrelazados, en señal de complicidad y amistad (¡¡¡uuuhmmmm!!!, como dirían en Catuche).

Instantanea que capta uno de los momentos más delicados de mi trabajo en Vietnam. Ahora si que podéis valorar mi indudable sacrificio en el trabajo.

No os podeis imaginar lo importante que es en el ámbito en el que me muevo poder beber de manera exagerado con todas aquellas personas que desean brindar con el Tay (guiri). Después de un día de fraterna orgía etílica, las autoridades locales están encantadas de colaborar y facilitar el trabajo, la gente llana siente que compartes una cultura común, que no eres ajeno a sus "mejores costumbres", y recuerdan siempre que pueden que "brindamos juntos áquel día".

Es algo triste, pero real. La cultura globalizada y universal del alcohol te la encuentras en todos los sitios, en todos los rincones del mundo. Me volví un empedernido de la cerveza y el ron en Venezuela para poder compartir con los "chamos" y los "panas" veladas donde hablábamos de lo divino y lo humano, además de trabajar. Ahora es el puñetero vino de arroz.

Así que ya sabéis la parte más delicada y oscura de mi profesión actual. Ahora si qu espero que me reconozcais la titánica labor que supone mi trabajo, mi espíritu de entrega total, la complicada, sútil, técnica y especializada que es mi labor entre los Muong de las montañas de Vietnam.

Chuc suc khoe!!!!!! (¡SALUD!)