12 de agosto de 2007

Las visitas de un año (dedicado a los reyes del gorroneo)


















Dentro de los fastos de mi primer año en Vietnam, no puedo dejar de mencionar el chorreo incesante de visitas que he tenido. Desde Noviembre de 2006, 16 personas y un conejo de trapo han estado en casa (1,3 personas por mes de media). Uno se podría engañar pensando que tiene muchos amigos, conocidos, amigos de amigos, familia y otros especímenes sin calificar que no pueden vivir mucho tiempo sin verme o que han querido estar conmigo. Que se han recorrido medio mundo para poder disfrutar de mi exclusiva y especial compañía, para disfrutar de un "catuchero indochino". Pero la triste realidad es que, a excepción de la Fina (santa mujer que a modo de madre de tonadillera me sigue incondicionalmente allá dónde vaya), a todos los demás estoy seguro que el principal y casi único motivo es que son unos "gorrones empedernidos". No les culpo, yo haría lo mismo.

Pero no me importa el motivo de su viaje. Con todos estos gorrones he tenido momentos muy bonitos y especiales. He estado ocupado (a veces un poco demasiado), acompañado (a veces incluso "entretenido" ;-). Han contribuido con sus palabras, sensaciones y sentimientos, a escribir un libro para mi que está quedando chulísimo. Y es que tengo un libro de visitas donde todo el que pasa por acá va dejando un poquito de sus sensaciones indochinas, y de su afecto (espero que sincero) hacia este catuchero. A veces ya me he empezado a leer el libro porque es un gustazo leerlo, consciente que no están todos los capítulos terminados porque tengo overbooking en casa hasta el año 2008. Y aunque ninguno de los ilustres escritores tiene todavía dos capítulos escritos, a mi me da que alguno/a va a tener más de uno.


Todo empezó en noviembre de 2006 con la visita de Chus y Arturo. Una cuenta pendiente que teníamos Arturo y yo de otro continente fue saldada en Vietnam. 3 semanas maravillosas donde estuvimos en Hanoi, Hue y Saigón (Ho Chi Minh). Vietnam de norte a sur.







La primera visita del 2007 ha sido la que trajo los gorrones (en este caso gorronas) de larga duración. Nada más y nada menos que un mes y medio (gracias a Dios con días intercalados en que las conseguí echar de casa) Belén y Bea estuvieron incordiando al abuelo desde mediados de enero de 2007 a finales de febrero.












Mi querido primo Gustavín se plantó en marzo de 2007 con su jín y Fermín, un amigo del trabajo durante dos semanas. La relación de Gustvín y jín, sin comentarios.







La ya célebra Fina (al menos en este blog) pisó
tierras asiáticas durante casi un mes, entre abril y mayo de 2007. Vino con Pilar y Carlos. Después de que ellos empezaran sus aventuras por la península Indochina, nos quedamos unos días de "luna de miel" hasta que llegó Marcos a principios de mayo, con el que estuvo viajando por estos mundos.











Cuando Fina se fue me dejó a Marcos, con el que estuve hasta la última quincena de mayo de 2007.







Raquel, ocupa profesional de la casa durante el mes de junio de 2007.





Rosa y Asier, los penúltimos en llegar este año. Del 11 al 31 de julio de 2007



Elena (bióloga de la Complutense) y su hermana Esther unos días en casa en julio compartiéndola con Asier, Rosa y yo. Sin imágenes


Iñigo, amigo muy majete de Asier y Rosa. imagen en stand-by. última quincena de julio de 2007



Este es mi cariñoso homenaje a todos los gorrones que este año han estampado unas letras en el libro de visita de mi casa. Nada de rencores por haceros públicos, ¿eh?. Muchos besos a todos, y gracias por vuestra visita, estais conmigo. A ver quién se atreve a ser ahora gorrón sabiendo que puede aparecer en el blog.


1 comentario:

Anónimo dijo...

Pues ya sabes "pequeño": a dejar páginas en blanco....., qué harán falta ¡¡¡¡